un cuerpo inerte y atado por el cuello con varias corbatas comenzaba a
deslizarse hacia abajo, al cabo de unos segundos se asomo la figura de
otro hombre, aquel que sostenía la corbata que ataba al cadáver, apenas
estuvo su rostro visible gritó algo que la multitud escucho claramente,
-- ¡Salvenlo!—y acto seguido dejo caer al vacío al hombre ahorcado, no
hace falta que describa como quedo aquel hombre pues por mas increíble
que parezca aquello no era lo mas impactante de la noche. El hombre que
se encontraba en el piso 18 caminaba de un lado a otro por la orilla del
piso destrozado, repentinamente se detuvo y con el la respiración de
la gente, dijo algo que la multitud no logro entender, unos escucharon….
Vayanse, otros Mírenme y hasta algunos dicen haber escuchado Púdranse,
pero eso quedo en segundo plano pues repentinamente el hombre comenzó a
desintegrarse como si algún acido potente estuviese siendo vaciado en su
piel, su piel se arrugo a una velocidad incomparable y luego su cuerpo
se volvió polvo, un polvo que voló por los aires. El silencio reino.
Los Especialistas dijeron que aquel suceso no fue mas que la reacción
que tiene el cuerpo humano al estar expuesto demasiado tiempo al gas
artificial y luego al oxigeno de un piso 18, también dijeron que la
explosión no había causado ningún otro daño en el edificio por lo cual
recomendaban dejarlo de 17 pisos, pero que para evitar que otra
explosión surgiera colocaran unas grandes rejas en todo el piso.
Lamentablemente yo tratando de mantener mi posición periodista debo
contradecir esas afirmaciones, no conozco ningún experimento donde se
demuestre con claridad que los hombres se desintegran de esa manera ni
tampoco creo que aquella explosión no causo mas daño que la destrucción
de las paredes, pues todos absolutamente todos los presentes sufrimos un
grave daño emocional, además los vecinos que se instalaron ahora en el
ultimo piso 17 decían que aquella gigantesca reja en sus apartamentos no
era para evitar explosiones de gas, si no para sentirse un poco mas
seguros al saber que por su ventana no entraría un hombre ahorcado con
una corbata.
No hay comentarios:
Publicar un comentario